Un estudio del Centro de Control y Prevención de Enfermedades en EEUU (CDC, por sus siglas en inglés) constató que quienes viven cuatro o más situaciones traumáticas tienen más riesgo de morir de forma prematura que aquellos que vivieron sólo una de esas experiencias.
Entre los eventos adversos considerados en el estudio se incluyen: separación de los padres, que alguno de ellos haya abusado del alcohol o las drogas, crecer en un hogar donde alguien sufre una enfermedad mental o haber estado en prisión, haber padecido o ser testigo de maltrato y experimentar la muerte de un ser querido.
El estudio publicado en American Journal of Preventive Medicine, fue desarrollado por el CDC y la organización Kaiser Permanente. En él participaron 17.337 adultos que entre 1995 y 1997 completaron un cuestionario médico que incluía preguntas sobre su infancia, y que fueron seguidos hasta 2006. Luego, con la información del Indice Nacional de Defunciones, los expertos accedieron a la edad en la que murieron.
Gracias a ese análisis los investigadores se percataron de la existencia de un patrón: quienes sufrieron cuatro o más experiencias traumáticas (12,1% de los sujetos estudiados) fallecieron en promedio a los 60 años.
Algo que no ocurrió con aquellos que vivieron una infancia con bajo nivel de estrés, quienes en promedio vivieron hasta los 79 años (63,6%).
Los expertos determinaron, además, que por cada evento la posibilidad de muerte prematura se incrementaba en un 13%, tendencia que se reflejó en ambos sexos, señala Brown: "No examinamos diferencias entre hombres y mujeres en el contexto de ocurrencia de mortalidad, las diferencias se daban más en el contexto de cuidado de su salud".
La Hipnosis es una herramienta muy útil para liberarse de los sentimientos negativos con respecto al pasado.
Nada se puede olvidar porque todo queda registrado en el inconsciente. Pero lo que se puede hacer rápidamente al ser guiado por un hipnotizador profesional o por un psicólogo que utilice la hipnosis como apoyo es tener una percepción serena y madura sobre los acontecimientos del pasado. El hipnotizador guiará a su inconsciente a mirar lo ocurrido como una experiencia para aprender, una visión como espectador más que como protagonista, de modo que esos recuerdos ya no provoquen alteraciones perjudiciales para la salud. Al ir perdiendo importancia esos acontecimientos porque ya no conmocionan emocionalmente, se recordarán menos; se harán menos presentes en la consciencia. Y cuando suceda, repito, la reacción será tranquilizadora.
Sergio Valdivia
Hipnoterapeuta
Profesor de Hipnosis Clínica y Profesional
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